holachina.com

se estrena, por fin, en español:

Iremos poco a poco completando las secciones de esta blog en Español. Y es que viajar de forma independiente por China es una de las experiencias más fascinantes que podemos tener. Pocos países del mundo ofrecen tanta variedad de paisajes: en China se pueden encontrar desde las montañas más altas del mundo hasta los desiertos más calurosos; desde junglas tropicales y bosques de bambú, hasta inmensos altiplanos. Allí, el viajero también puede tropezarse con pueblos que siguen guardando celosamente sus tradiciones y que parecen estar completamente aislados del mundo moderno pero, sin embargo, están a pocos kilómetros de una ultramoderna y bulliciosa metrópolis.

Además de artículos sobres viajes, habrá artículos sobre la cultura china y cursos de chino en Madrid.

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El viejo y el nuevo en Litang 理塘 Sichuan Province 四川省

Esta foto fue tomada en 2004 en la carretera de Litang 理塘 en la provincia de Sichuan a Batang en la frontera con el Tíbet.

La foto es un presagio de los cambios que estaban por venir a esta zona de Sichuan. En la foto hay nómadas tibetanos tradicionales arreando sus Yaks. Detrás de ellos, un auto nuevo que estaba a punto de forzarlos salir de la carretera.

Cursos previos de Chino en Madrid

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La Guía esencial de la lengua china

Baoyan Zhao & Francisco Javier López Calvo

La Guía esencial de la lengua china ha sido escrito por mi amiga y colega en el Centro Superior de Idiomas Modernas (CSIM) de la Universidad Complutense de Madrid, Baoyan Zhao y su coautor Francisco Javier López Calvo.

La Guía esencial de la lengua china es un libro de consulta que resuelve aquellas dudas que surgen durante el estudio del chino. Por medio de una accesible estructura de preguntas y respuestas los autores se acercan a los distintos aspectos de la lengua china, de manera detallada y precisa pero a la vez con un estilo fácilmente comprensible para el lector. Tanto si estáis pensando en empezar con el estudio del chino, si os encontráis en las primeras fases del aprendizaje o si lleváis cierto tiempo con ello, en este libro encontraréis una gran cantidad de información provechosa, interesante y curiosa. Dado que la lengua china a primera vista puede intimidar por su complejidad y por lo diferente, este libro pretende ser el mapa o la guía de viaje que os ayudará a comprender mejor el punto donde os encontráis, y que sin duda hará más fácil y eficaz vuestro estudio. Como apunta el propio libro en su portada, un buen comienzo es la mitad del éxito, y a través de sus páginas encontraréis la manera de que vuestro comienzo sea el mejor posible.

Luocheng

Posiblemente El Mejor Sitio Para Tomar El Té En China

Ubicación: La provincia de Sichuan, China, en la comarca de Leshan (2-3 horas)

El pueblo vetusto de Luocheng es una joya para todos aquellos en busca de la cultura del té en su forma más tradicional y popular. En realidad, Luocheng tiene fama por su arquitectura en forma de barco: los dos lados de su calle principal se ensanchan gradualmente hacia los dos extremos, creando así la silueta ovalada de un barco.

Hay un bonito teatro, restaurado con esmero, que tiene una pierna en cada lado de la calle, haciendo de proa y completando la imagen de un barco. El teatro está cubierto en azulejos grises y decorado de forma exuberante con escenas históricas y estatuas de Budas sonrientes.

Aparte de la arquitectura, lo que hace especial a Luocheng es la hilera de casas de té a lo largo de la calle principal, protegida por los pórticos de madera que sobresalen de los edificios. Observando esa mar de mesas y sillas de bambú, ocupadas por ancianos en descoloridas chaquetas estilo Mao que disputan con pasión cada jugada de sus partidas de cartas o Mah-jong mientras fuman unas pequeñas pipas fabricadas de raíces, los visitantes realmente pueden imaginar que han dado un salto en el tiempo.

Es imprescindible tomarse una taza de té con los lugareños para hacerse una idea de cómo era la vida en el pueblo en los tiempos pasados. El sitio entero rezuma autenticidad y ambiente, dos elementos que a menudo faltan en los lugares históricos más populares y concurridos. De hecho, con la excepción de algún mochilero perdido, es muy poco probable toparse con otros turistas al explorar las calles apacibles de este pueblo tranquilo. Lo cierto es que Luocheng aun está fuera de los circuitos turísticos.

No sabemos cuánto durará esta tranquilidad, depende de una posible mejora en los accesos al pueblo. De momento, se tarda 3 horas en cubrir los 60 kilómetros que separan Luocheng de Leshan y sólo los primeros 20 van por carretera.

Después, te espera un viaje agotador, durante el cual estarás dando saltos continuos en tu asiento, por uno de los peores caminos de toda China (probablemente mejor ahora), aunque hay que decir que el paisaje es muy bonito, rural y tranquilo.

Por cierto, la ciudad de Leshan – aparte de su famosa estatua de Buda, la más grande en el mundo – también tiene una casa de té muy pintoresca en una de las viejas torres al lado del río.

A la vuelta, puedes bajarte del autobús en los pueblos alrededor de los Wu Tong Qiao, o “Cinco Puentes”, a mitad de camino entre Luocheng y Leshan, para disfrutar del paisaje al lado del río, y tomarte una taza de té en uno de los establecimientos al aire libre, bajo la sombra de unos árboles centenarios.

LUOCHENG: INFORMACIÓN PRÁCTICA

Luocheng: Hay servicios regulares entre la estación de Lian Xin en Leshan, y Luocheng. El autobús numero 1 que sale del centro de la ciudad te llevará directamente a la estación, o puedes coger un taxi por unos 10 yuanes. El viaje tarda unas 3 horas, ya que la mayor parte trascurre por una carretera rural, a veces sin asfaltar, llena de baches. Si quieres bajarte en Wu Tong Qiao (Algunas autobuses utilizan una carretera mejor para volver a Wu Tong Qiao cerca de Leshan), y luego volver a la ciudad (Leshan), puedes parar cualquier autobús a Leshan desde el cruce en la carretera. Entre Leshan (estación Lian Xin) y Chengdu (estación Xinnanmen) hay autobuses regulares a lo largo del día.

Yangmei

Provincia de Guangxi cerca de Nanning

Yangmei /Provincia de Guangxi

Aunque el antiguo pueblo de Yangmei está situado a tan solo 30 kilómetros de la ciudad moderna, verde y dinámica de Nanning, la capital de la provincia de Guangxi en el sur oeste de China, por su apariencia y estilo de vida podría estar en otra planeta. La nueva autopista que sale de Nanning apenas alcanza unas 10 kilómetros, antes de que el autobús dé un giro brusco y entre en una carretera rural. El resto del viaje tardará unas dos horas más, mientras el autobús se abre paso entre el tráfico de un mercado local, queda atrapado en un atasco de motociclos, cruza un río en un pequeño y oxidado ferry, y hace parada en todos los pueblos en el camino, dejando pasajeros y mercancía.

El paisaje es bonito y muy rural. Una gran parte de la gente de esta tierra son de la etnia Zhuang, aunque su vestimenta y aspecto físico son indistinguibles de los chinos de la etnia Han, el grupo étnico mayoritario. Se ganan la vida dedicándose al cultivo de la caña de azúcar y los plátanos. Testigo de lo último son las inmensas plantaciones, de un verde intenso, que se extienden a ambos lados del camino.

El pueblo de Yangmei pude haber corrido la misma suerte que miles de otros pueblos en China; abandonado por su población en búsqueda de una vida mejor en la gran ciudad, y relegado al olvido. Afortunadamente, Yangmei ha sido salvado por su gran legado arquitectónico de casas y mansiones que datan de las dinastías Ming y Qing, y por su ubicación inmejorable al lado de un río, en medio de un paisaje frondoso.

Sin embargo, lo mejor de todo es que Yangmei sigue siendo un pueblo auténtico, y no ha sido convertido en pueblo temático, tipo Disneylandia; una desgracia en la que han caído tantos otros pueblos bonitos en China. Todavía hay gente viviendo en las casas antiguas y señoriales que el viajero puede visitar.

La mayoría de la población sigue dedicándose a tareas agrícolas, y no a la industria turística. Solo la presencia de unas abuelas entrañables que venden zapatos en miniatura, cosidos a mano, y la existencia de un par de restaurantes al aire libre, cerca del río, delatan que este pueblo ya ha sido descubierto por las turistas.

No hay grandes monumentos para visitar en Yangmei. Sólo es un sitio agradable para pasar unas horas, pasear y sumergirse en el ambiente de la China antigua; algo que es cada vez más difícil de encontrar en la China de hoy. Señales de madera indican donde se encuentran las mansiones Ming y Qing, escondidas en pequeños y estrechos callejones, o alrededor de los estanques de loto. Los lugareños, en su mayoría gente mayor, se reúnen en los patios, o en las pequeñas plazas enlosados del pueblo, donde fuman pipas grandes y juegan al Mah-jong.

Algunos prueban su suerte pescando en los estanques. Aparte de las casas antiguas, hay unos templos dispersos por el pueblo. Muchos sufrieron daños importantes durante la Revolución Cultural y ahora están siendo reconstruidos y restaurados cuidadosamente. En el templo de Confucio, para mencionar uno, se han inventado una novedosa forma de recaudar fondos, ofreciendo los visitantes la oportunidad de ser inmortalizados en una placa memorial.

Por el módico precio de 10 Yuanes uno puede ver su nombre, y en el caso de un extranjero también su nacionalidad, grabado en una placa de mármol negro por un anciano venerable, vestido en la chaqueta azul de los campesinos, al puro estilo Mao, y con unas gafas gruesas. A continuación, estas placas son empotradas en las puertas y paredes del templo, como un libro de visitantes, pero en piedra.

Después de unas horas andando por el pueblo, es posible que uno empiece a tener algo de hambre. Cerca del río hay unos restaurantes familiares especializados en productos locales. El pescado del río es lo más recomendable, y lo cocinan en varios estilos. Además, los robustos pollos de este pueblo tienen buena fama también. Una buena comida, un par de cervezas frías y las bonitas vistas del río, son la mejor receta para pasar el tiempo que queda antes de la salida del último autobús en dirección a Nanning, que es a las 16:00. Un último consejo: si te gustan los plátanos; ¡haz lo que hacen los visitantes de Nanning y compra un par de kilos! Otro producto famoso son las jarras caseras de chiles y ajos escabechados que pueden convertir el viaje de vuelta en una experiencia picante.

YANGMEI: INFORMACIÓN PRÁCTICA

Transporte: Los autobuses para Yangmei salen de una estación pequeña, a unos 10 minutos de la estación de trenes. Baja la calle Chaoyang Lu, pasando delante del Hotel Yinhe: después de andar una manzana, coge la primera calle a la derecha y luego gira a la derecha otra vez, entrando en la calle Huaqiang Lu. La estación de autobuses está al lado de la casa numero 198. Los autobuses salen cada hora y media, empezando a las 8:50. El último autobús de Yangmei para volver a Nanning sale a las 16:00. ¡Cuenta con unas dos horas para el trayecto de 30 kilómetros!

Dónde alojarse: Hemos visto por lo menos un albergue básico, por si se pierde el autobús. Además había un pequeño hotel en estilo tradicional, a punto de abrir.

Dónde comer: Los restaurantes al lado del río son la mejor opción. El pescado que sirven viene directamente de los tanques y está más que fresco. Los amantes de la carne también tienen amplias posibilidades de degustar platos de pollo o cerdo.